“El Buen Samaritano” urdió su millonaria estafa a vista y paciencia de la ASFI
AUTOR
CARLOS QUISBERT
05 – 08 – 2022
ILUSTRACIONES
ABECOR
EDITORA WEB Y COORDINADORA GENERAL
CARLA HANNOVER
PROGRAMACIÓN
ENRIQUE CRUZ PUENTE
autor
CARLOS QUISBERT
05 – 08 – 2022
ILUSTRACIONES:
ABECOR
EDITORA WEB Y COORDINADORA GENERAL:
CARLA HANNOVER
PROGRAMACIÓN:
ENRIQUE CRUZ PUENTE
La Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero, que es el principal ente regulador del sector, no alertó a los ahorristas de la cooperativa sobre la falta de liquidez de la misma. Tampoco fiscalizó el accionar de la entidad lo cual permitió que ésta, pese a estar con una pérdida de 91,3 millones de dólares, siga captando socios.
Un informe emitido por la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) en 2009, -en medio del proceso de adecuación al que se presentaron 53 cooperativas a nivel nacional- reveló que en esa fecha la Cooperativa de Ahorro y Crédito “El Buen Samaritano” ya presentaba una pérdida de 32,3 millones de dólares.
Sin embargo, la Cooperativa continuaba con una masiva campaña publicitaria, que años después se comprobó que no estaba autorizada por la entidad fiscalizadora, para captar más ahorristas y socios a nivel nacional, a los que les ofrecía el pago de un interés de hasta 10% anual.
Según se lee en el sitio web de la ASFI su principal función como institución es la de “regular, controlar y supervisar los servicios financieros en el marco de la Constitución Política del Estado, la Ley N° 393 de Servicios Financieros y los Decretos Supremos reglamentarios, así como la actividad del mercado de valores, los intermediarios y sus entidades auxiliares”. Si en 2009 ya tenían un informe que confirmaba prácticamente la quiebra de esta cooperativa ¿por qué no hicieron nada?, es la pregunta de algunas de las víctimas de esta millonaria estafa urdida por “El Buen Samaritano”
Según Hoggier Hurtado, el ex director del consejo administrativo de esa entidad financiera y principal acusado de la estafa, en 2014 la cooperativa çalcanzó a tener 45.000 socios. Asimismo, los registros judiciales revelan que los gerentes y directivos de la entidad ya contaban con múltiples denuncias por estelionato, estafa con víctimas múltiples, uso de instrumento falsificado y hasta delitos financieros relacionados a otras nueve entidades “fachada”.
Tres funcionarios de la ASFI pasaron a trabajar para “El Buen Samaritano”
Crédito: Carlos Quisbert / Página Siete.
En estos años, pese a todas las notas que intercambió con funcionarios de la ASFI, en las que adjuntó abundantes documentos y detalles con la denuncia de la “quiebra fraudulenta y la millonaria estafa”, Sebastián Claure, una de las víctimas, no logró que la institución se pronuncie en su favor, al contrario, tres de los funcionarios que encabezaron la comisión que trató su caso, pasaron a trabajar para la Cooperativa.
“Abogaban por El Buen Samaritano, me decían ‘pero señor Claure, sería mejor que acepte esos terrenos’, con total cinismo”, lamenta Claure.
Raúl Miranda, uno de los que en 2009 firmó y otorgó por la ASFI, la autorización del Certificado de Adecuación para la Cooperativa, en 2011 pasó a trabajar para “El Buen Samaritano” con un salario de 15.450 bolivianos. Armando Farfán, otro exfuncionario de la ASFI, pasó a ser gerente general de la Cooperativa entre 2014 y 2015; fue quien propuso y logró que se cambien las cláusulas de los contratos con cientos de ahorristas en beneficio de la Cooperativa.
Finalmente, Moisés Emilio Cabrera, que fue parte del equipo multidisciplinario en la ASFI hasta 2019, desde 2020 es –según los documentos de los procesos judiciales– abogado de la Cooperativa. Para el actual gerente general de “El Buen Samaritano”, Boris Borda, Cabrera no incurre en ninguna falta ética, pues fue contratado por su conocimiento en el área.
En 2015 una resolución del Ministerio de Economía declaraba en quiebra a “El Buen Samaritano”
Crédito: Carlos Quisbert / Página Siete.
La pérdida millonaria de la Cooperativa de Ahorro y Crédito “El Buen Samaritano” “se fue incrementando año tras año, alcanzando al 31 de diciembre de 2015 a 91,3 millones de dólares, producto de su incapacidad para soportar sus gastos financieros, administrativos y operativos a través de la generación de ingresos” se lee en la lapidaria resolución administrativa ASFI 081/2017. El texto está citado en la página 48 de la “Resolución Jerárquica MEF/VPSF/URJ – Sirefi Nº 040/2017”, que lleva la firma del entonces ministro de Economía, Luis Arce Catacora, hoy presidente del Estado Plurinacional de Bolivia.
El documento fue la respuesta a la impugnación que Hurtado presentó, como representante de la Cooperativa “El Buen Samaritano”, contra la decisión que la ASFI tomó el 30 de noviembre de 2016. La resolución Nº 1132, determinó revocar definitivamente el “Certificado de Adecuación” otorgado por Miranda a la Cooperativa en 2009. Esto implicaba la ilegalidad de varias acciones que Hurtado realizó contra socios que reclamaban la devolución de su dinero.
Contradictoriamente, la certificación otorgada a “El Buen Samaritano” por la ASFI en 2009, se dio cuando las pérdidas de la Cooperativa ya eran de 32,3 millones dólares. Sin embargo, en la impugnación dirigida a Arce, Hurtado aseguró que eran las resoluciones de la ASFI las que le generaban pérdidas económicas, porque “dañaban la imagen” de la Cooperativa ante sus socios y exigía un resarcimiento millonario.
Los documentos citados en este reportaje fueron facilitados por las víctimas, otros figuran en los archivos virtuales de las instituciones financieras y otros en los expedientes judiciales. El Ministerio de Economía, la Fiscalía de La Paz y la familia Hurtado no dieron respuesta a los pedidos de entrevista que hizo Página Siete.
Crédito: El Buen Samaritano.
El director general interino de la ASFI, Reynaldo Yujra, informó a este medio que no se pronunciará sobre las denuncias de estafa y delitos financieros que se tramitan desde hace nueve años contra la Cooperativa “El Buen Samaritano”. En una nota dirigida a este medio, señala que esa entidad no cumplió con los requisitos para obtener su licencia de funcionamiento, lo que la deja fuera de su fiscalización.
“Por los antecedentes expuestos, la Cooperativa “El Buen Samaritano”, no llegó a completar su adecuación al ámbito de supervisión y no logró obtener Licencia de Funcionamiento otorgada por ASFI, por tanto, no llegó a constituirse en una entidad financiera supervisada por esta Autoridad de Supervisión”, informó Yujra ante las consultas.
En la actualidad, “El Buen Samaritano” aún debe a “944 socios, 33 millones de bolivianos”, de acuerdo a los datos brindados por el actual gerente de esa entidad financiera.